Se confirma la cancelación de «Julie and The Phantoms», una de las series más dulces y reminiscentes de Netflix.

«Nos hemos enterado esta semana de que Netflix no va a renovarnos para una segunda temporada«, anunciaba Kenny Ortega en redes sociales. «A pesar de tener los corazones tristes, salimos adelante orgullosos por lo que hemos conseguido como equipo y por la familia que hemos construido mientras creábamos a Julie.»

Sin conocer los números reales en visualizaciones y beneficios para Netflix, lo cierto es que las redes sociales adoraron todos y cada uno de los aspectos de la historia de Julie y su banda de músicos fantasmas. En la misma línea, no son pocas las personas que han mostrado su desagrado ante la noticia más temida: se cancela la serie.

Un viaje al Disney de 2010

High School Musical, Camp Rock, Los Magos de Waverly Place, Hannah Montana… Los que crecimos con este tipo de ficción en pantalla (antes de las plataformas de streaming y, por supuesto, antes de que gran parte de la ficción juvenil fuera interpretada por elencos indiscutiblemente adultos con tramas exageradamente alejadas de lo verdaderamente juvenil), nos topamos con nostalgia pura al descubrir esta serie… y nos encantó.

Es innegable que Julie and The Phantoms tiene la dulzura de la ficción musical del Disney de hace más de una década. Toda una bomba que invita a la reminiscencia, resulta ser, además, una puerta al talento de su elenco. Madison Reyes (Julie en la serie, protagonista de la historia), tiene un potencial indudable. Algunos podrían incluso tener la esperanza de ver en ella una salida de la interpretación hacia su propia música, como pasó con Olivia Rodrigo.

«Julie and The Phantoms»: lo que se recordará

Sí, Kenny Ortega se tiene que despedir de esta apuesta musical tras una única temporada. La noticia, aunque triste, ha funcionado como motor y ha puesto en boca de todos, de nuevo, los buenos momentos vividos con el elenco de la producción. Otra de las claves del amor recibido por parte de los espectadores es precisamente esa, la cercanía que se palpaba entre actores.

A pesar de su final repentino, Julie and The Phantoms siempre será recordada por esos vídeos tan familiares de contenido extra (en el estudio de grabación, ensayos de rutinas de baile, anécdotas de los actores y del rodaje, etc.), la banda sonora tan cuidada y emotiva y, especialmente, las relaciones de los jóvenes actores que dieron vida a sus personajes. Y tal vez este sea el mejor final que pueda recibir.

 

 

Imagen principal: «Julie and The Phantoms» en Netflix