Taburete pone fin a la primera edición del Push Play Festival

Después de más de 70 de conciertos por toda España, Taburete puso el punto final a su gira ‘La Furyo Infinita’ en el Hipódromo de la Zarzuela de Madrid, como parte del cartel del Push Play Festival. Con la necesidad de haber tenido que abrir nueva fecha por el rapidísimo ‘sold out’, Taburete se corona por todo lo alto y realiza doblete los días 29 y 30 de septiembre en la primera edición de este evento.

A las 22:00 de la noche del 29 de septiembre de 2021, el recinto del Hipódromo de Madrid estaba colapsado. Era muy difícil encontrar hueco libre entre las gradas o la restauración, los seguidores de la banda no querían perderse una actuación que prometía y en la que seguro que el grupo de pop-rock madrileño tenía en mente armar una buena joda sobre el escenario.

Poco después, empezaba a escucharse la voz de Willy por los altavoces y todo el público volvía la vista hacia el escenario y aunque al principio solo se le escuchaba y no se le veía, los técnicos conseguían proyectar el plano del backstage en las pantallas gigantes situadas a ambos lados de la escena, para lograr que los asistentes pudiesen vivir de cerca el típico ritual de Taburete antes de empezar un concierto. «Tocar como nunca y sonar como siempre», arengaba un eufórico Bárcenas a sus compañeros.

El escenario se iluminó de repente y los integrantes de la banda se fueron colocando uno a uno sobre el escenario para empezar a tocar, con sus respectivos instrumentos, una intro. La fiesta estaba a punto de comenzar, solo faltaba que Willy entrase a escena. Una vez arriba y tras un caluroso recibimiento por parte de su fans, ‘Por Lo Que Pueda Pasar’ fue la canción elegida para empezar la velada.

De su último disco de estudio, ‘La Broma Infinita’, los madrileños eligieron como segundo tema de la noche ‘El Último Baile de Dunas Mitchell’, un single muy pegadizo y marchoso, que fue la apuesta perfecta para terminar de animar a sus seguidores a cantar con ellos y por si alguien se había despistado al incorporarse al concierto, no tardó en hacerlo en cuanto escuchó los acordes de uno de los temas preferidos por el público de Taburete y que mejor suenan en directo, ‘Mexico D.F’.

Como no podía ser de otra manera en un fin de gira, Taburete decidió incluir algunos de sus temas más antiguos, aquellos que forman parte de la trayectoria musical de la banda y que gustan mucho entre sus seguidores, entre ellos, ‘Kaiserlautern’ de su disco ‘Dr. Charas’.

Pero revivir viejas canciones no fue la única sorpresa que el grupo había preparado para aquella noche y Willy pidió un fuerte aplauso para su amigo y compañero de profesión, David Otero, junto con el que cantó a dúo la versión que comparten ambos artistas de ‘Una Foto en Blanco y Negro’.

Tras la bonita colaboración, Taburete despidió con un fuerte aplauso a David y Willy se dirigió a las gradas para preguntar: «¿Cómo estáis Madrid?», a lo que los asistentes respondieron al unísono: «¡Bieeeeeen!». La velada seguía su curso y la gente quería más , el grupo se lanzó a cantar ‘Venado Tuerto’.

Nada más terminar de interpretar el tema, Antón cogía el micrófono para dirigirse al público: «Después de 70 conciertos, gracias por estar aquí, sois la hostia» y antes de continuar con el concierto, Carreño pedía un fuerte aplauso para el productor de la banda, «Don Edu», que como aseguraba el guitarrista «se ha currado este disco», para los técnicos y por supuesto, para los mánagers. Dicho esto, ‘Entre Tus Piernas’ empezaba a sonar más fuerte que nunca por todo el recinto.

«Muchas gracias, Madrid», exclamó Willy al ver a sus fans entregados con cada tema. «Qué alegría y qué alboroto», continuaba diciendo. Era la hora perfecta para escuchar ‘2018: Odisea en el Espacio’, la canción que Taburete elegía hace un año, como carta de presentación de su disco ‘La Broma Infinita’. De temazo en temazo, ‘Madame Ayahuasca’  fue el siguiente sencillo que la banda de pop-rock cantó esa noche.

Era el momento de llamar a otro viejo conocido de Taburete, pero en esta ocasión, no se trataba de dar la bienvenida a otro invitado, sino de cantar su conocido y querido tema, ‘El Rey del Contrabando‘, que no es otro que ¡Fernando! El grupo enlazaba este hit con otro clásico, ‘El Fin’ y Willy pidió a todos los presentes que la cantasen con fuerza imaginándose «como si se estuviesen quitando toda la mierda de encima», dando a entender lo importante que era liberarse de todas aquellas cargas que la crisis del coronavirus había traído consigo.

«Nos habéis regalado la noche más bonita desde hace dos años», se sinceraba Antón pasada la hora de concierto, «no tenemos palabras, nunca se nos va a olvidar», continuaba agradeciendo a sus seguidores. Llegaba el turno de la canción entre canciones, una declaración de amor en toda regla y que como ya es costumbre en cualquier «taburetazo», Carreño dedicaba a su novia: ‘Abierto en Vena’. Al terminar el tema, era el momento perfecto de presentar a los integrantes del grupo, Willy se encargaba de hacerlo y por último Antón pedía un fuerte aplauso para el vocalista.

‘Walter Palmeras’ y ‘Amos del Piano Bar’ eran otros dos clásicos que no podía faltar en el cierre de gira de Taburete y que fueron cantados de principio a fin por todos los presentes. Y como no, siguiendo con su álbum ‘La Broma Infinita’, ‘Brindo’ también tuvo su hueco en una noche que aún guardaba sorpresas como la versión del emblemático tema  ‘Bohemian Rhapsody‘  de Queen.

Todavía quedaban algunos grandes temas de Taburete por oír y el público no estaba dispuesto a irse a casa sin escucharlos. Era el momento de baladas como la de  ‘John Ford’ y por supuesto la de  ‘Sirenas‘, la canción con la que se dieron a conocer mundialmente y que les permitió abrirse un hueco dentro del panorama musical.

«He venido, me he despertado de la siesta del destino…», todo el mundo se sabía la primera estrofa de uno de los singles que nunca falta en una fiesta de Taburete, ‘Belerofón’. «Hoy es miércoles, ¿mañana no trabajáis ninguno?», preguntaba Bárcenas entre risas a sus seguidores. «Amigos, viendo el espíritu, hay poco que decir», continuaba diciendo.

«Muchos dicen que no es el camino más sano pero si el más divertido», sobraban las palabras porque todos los presentes sabían que en ese instante Taburete iba a interpretar ‘Caminito a Motel‘, otro clásico de la banda que terminaba el concierto al ritmo de su propia versión de ‘Amigos para Siempre’ de Los Manolos, para tristeza de sus incondicionales fans.

 

 

Imagen destacada: Laura Borrega – WHY NOT